36Entonces Gedeón dijo a Dios: Si vas a dar a Israel la salvación de mi mano, como has dicho,
37Mira, pondré la lana de una oveja en el suelo donde se trilla el trigo; Si solo hay rocío en la lana, mientras que toda la tierra está seca, entonces estaré seguro de que es tu propósito darle a Israel la salvación por mi mano, como has dicho.
38Y así fue, porque se levantó temprano a la mañana siguiente y, retorciendo la lana en sus manos, sacó una palangana llena de agua del rocío sobre la lana.
39Entonces Gedeón dijo a Dios: No te muevas a ira contra mí si solo digo esto: déjame hacer una prueba más con la lana; deja que la lana esté seca, mientras la tierra está cubierta de rocío.
40Y esa noche Dios lo hizo; porque la lana estaba seca, y había rocío sobre toda la tierra que la rodeaba.