16¿Quién me dará ayuda contra los pecadores? ¿y quién será mi apoyo contra los malhechores?
17Si el Señor no hubiera sido mi ayudante, mi alma habría descendido rápidamente a la muerte.
18Si digo: Mi pie se resbala; tu misericordia, oh Señor, es mi apoyo.
19Entre todos mis pensamientos turbados, tus consolaciones son el deleite de mi alma.
20¿Qué parte tienes con el trono del pecado, que convierte el mal en ley?