92Si tu ley no hubiera sido mi delicia, mis problemas me hubieran puesto fin.
93Siempre tendré en cuenta tus órdenes; porque en ellos tengo vida.
94Soy tuyo, oh sé mi salvador; porque mi deseo ha sido por tus reglas.
95Los pecadores han estado esperando que yo me entregue a la destrucción; pero daré toda mi mente a tus mandatos.
96He visto que nada en la tierra está completo; pero tu enseñanza es muy amplia. MEM.
97¡Oh, qué amor tengo por tu ley! Todo el día medito en ella.