5Dios, tú sabes mi locura; y mis delitos no te son ocultos.
6No sean avergonzados por mi causa los que te esperan, oh Señor Jehová de los ejércitos; no sean confusos por mí los que te buscan, oh Dios de Israel.
7Porque por amor de ti he sufrido afrenta; confusión ha cubierto mi rostro.