6Ellos vuelven por la tarde; hacen un ruido como un perro, y rondan la ciudad.
7Mira, el odio está cayendo de sus labios; las maldiciones están en sus lenguas: dicen: ¿Quién nos oye?
8Pero te reirás de ellos, oh Señor; te burlaras de todas las naciones.
9O mi fuerza, pondré mi esperanza en ti; porque Dios es mi torre fuerte.
10El Dios de mi misericordia irá delante de mí: Dios me dejará ver mi deseo hecho en mis enemigos.