18En verdad te digo, cuando eras joven, te vestías para ir a donde querías; pero cuando seas viejo, extenderás tus manos y otro te vestirá, y serás tomado donde no tienes ganas de ir.
19Ahora esto dijo, señalando la clase de muerte por la cual daría gloria a Dios. Y después de decir esto, le dijo: ven por mí.