3Han derramado la sangre del pueblo de Jerusalén como agua en toda la ciudad y no queda nadie que pueda sepultar a los muertos.
4Hemos sido el hazmerreír de nuestros vecinos. Ridiculizados por quienes nos rodean.
5¿Hasta cuándo, Señor? ¿Acaso estarás enojado con nosotros para siempre? ¿Hasta cuándo arderá tu ira?
6¡Derrama tu ira sobre las naciones infieles que no te conocen, y sobre los reyes que no te adoran!
7Porque ellos han destruido a los descendientes de Jacob y convirtieron nuestra nación en un desierto.
8¡No nos hagas pagar por los pecados de nuestros padres! Apresúrate a venir a nosotros porque necesitamos desesperadamente tu compasión.
9¡Ayúdanos, Dios de nuestra salvación, por tu maravilloso nombre! ¡Sálvanos y perdona nuestros pecados por causa de quien tú eres!