8Siempre he mantenido al Señor delante a mí, y no seré zarandeado porque él está a mi lado.
9¡Por eso mi corazón se contenta! ¡Por eso estoy lleno de alegría! ¡Por eso mi cuerpo vive con una esperanza!
10Porque no me abandonarás en la tumba, ni permitirás que tu santo experimente la descomposición de su cuerpo.
11Me has mostrado el camino de la vida, me has llenado de alegría con tu presencia, y con el placer de vivir contigo para siempre.