2Dijiste, oh alma mía, á Jehová: Tú eres el Señor: mi bien á ti no aprovecha;
3Sino á los santos que están en la tierra, y á los íntegros: toda mi afición en ellos.
4Multiplicaránse los dolores de aquellos que sirven diligentes á otro dios: no ofreceré yo sus libaciones de sangre, ni en mis labios tomaré sus nombres.
5Jehová es la porción de mi parte y de mi copa; tú sustentarás mi suerte.
6Las cuerdas me cayeron en lugares deleitosos, y es hermosa la heredad que me ha tocado.
7Bendeciré á Jehová que me aconseja: aun en las noches me enseñan mis riñones.