150Los malvados se apresuran a atacarme. Ellos rechazan por tu palabra por completo.
151Pero tú, Señor, estás aquí a mi lado. Todos tus mandamientos son verdaderos.
152Desde hace mucho entendí que tus leyes permanecerán para siempre.
153¡Por favor mira mi sufrimiento y sálvame! Mira que no me he olvidado de tus enseñanzas.
154Defiende mi causa y sálvame conforme a tu promesa. ¡Guarda mi vida, Señor!