7La cual no teniendo capitán, ni gobernador, ni señor,
8Prepara en el verano su comida y allega en el tiempo de la siega su mantenimiento.
9Perezoso, ¿hasta cuándo has de dormir? ¿cuándo te levantarás de tu sueño?
10Un poco de sueño, un poco de dormitar, y cruzar por un poco las manos para reposo:
11Así vendrá tu necesidad como caminante, y tu pobreza como hombre de escudo.
12El hombre malo, el hombre depravado, anda en perversidad de boca;
13Guiña de sus ojos, habla con sus pies, indica con sus dedos;
14Perversidades hay en su corazón, anda pensando mal en todo tiempo; enciende rencillas.
15Por tanto su calamidad vendrá de repente; súbitamente será quebrantado, y no habrá remedio.