11Aun el muchacho es conocido por sus hechos, si su obra fuere limpia y recta.
12El oído que oye, y el ojo que ve, ambas cosas ha igualmente hecho Jehová.
13No ames el sueño, porque no te empobrezcas; abre tus ojos, y te hartarás de pan.
14El que compra dice: malo es, malo es: mas en apartándose, se alaba.
15Hay oro y multitud de piedras preciosas: mas los labios sabios son vaso precioso.
16Quítale su ropa al que salió por fiador del extraño; y tómale prenda al que fía la extraña.