23El corazón del sabio es el maestro de su boca, y da mayor conocimiento a sus labios.
24Las palabras agradables son como la miel, dulces para el alma y una nueva vida para los huesos.
25Hay un camino que parece recto ante un hombre, pero su fin son los caminos de la muerte.
26El deseo del hombre trabajador está trabajando para él, porque su necesidad de comida lo está impulsando.
27Un hombre bueno para nada es un diseñador del mal, y en sus labios hay un fuego ardiente.
28Un hombre con propósitos retorcidos es causa de pelea en todas partes: y el chismoso crea problemas entre amigos.
29Un hombre violento pone el deseo del mal en la mente de su prójimo y lo hace ir por un camino que no es bueno.
30Aquel cuyos ojos están cerrados es un hombre de propósitos retorcidos, y el que cierra sus labios apretadamente hace que el mal suceda.
31La cabeza gris es una corona de gloria, si se ve en el camino de la justicia.
32Mejor es el hombre lento para enojarse que el hombre de guerra, y el que tiene control sobre su espíritu, que el que toma una ciudad.