6Ellos decían esto para ponerle una trampa a Jesús, a fin de condenarlo. Pero Jesús se arrodilló y escribía en la tierra con su dedo.
7Ellos seguían exigiendo una respuesta, así que él se levantó y les dijo: “Cualquiera de ustedes que nunca haya pecado puede lanzar la primera piedra sobre ella.”
8Entonces se arrodilló otra vez y siguió escribiendo en la tierra.