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Lucas 1:8-57 in Spanish

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Lucas 1:8-57 in La Biblia en Español Sencillo

8 Ahora sucedió que ejerciendo su turno actuando como sacerdote ante Dios según el orden de su clase,
9 Como era costumbre conforme al oficio del sacerdocio, le tocó en suerte entrar al Templo para quemar el incienso al Señor.
10 Y todas las personas estaban ofreciendo oraciones fuera, en el momento de la quema de incienso.
11 Y vio a un ángel del Señor en su lugar al lado derecho del altar.
12 Y Zacarías se turbó cuando lo vio, y vino temor sobre él.
13 Pero el ángel dijo: No temas, Zacarías, porque tu oración ha llegado a los oídos de Dios, y tu mujer Elisabet tendrá un hijo, y su nombre será Juan.
14 Y te alegrarás y te deleitarás; y muchas personas tendrán alegría de su nacimiento.
15 Porque él será grande a los ojos del Señor; no tomará vino ni bebida fuerte; y él estará lleno del Espíritu de Dios desde su nacimiento.
16 Y por él se convertirán muchos de los hijos de Israel al Señor su Dios.
17 Y él irá delante de él, en el espíritu y en el poder de Elías, volviendo los corazones de los padres a sus hijos, y los rebeldes al camino de la prudencia y justicia; para preparar al Señor un pueblo cuyos corazones han sido bien dispuestos.
18 Y Zacarías le dijo al ángel: ¿Cómo puedo estar seguro de esto? Porque yo soy un hombre viejo, y mi esposa está muy avanzada en años.
19 Y respondiendo el ángel, dijo: Yo soy Gabriel, cuyo lugar es delante de Dios; Me ha enviado para decirte estas palabras y darte esta buena noticia.
20 Ahora, mira, estarás sin voz ni lenguaje hasta el día en que esto ocurra, porque no has creído en mis palabras, que tendrán efecto en el momento correcto.
21 Y la gente estaba esperando a Zacarías y se sorprendieron porque estuvo en el Templo por largo tiempo.
22 Y cuando salió, no pudo decir nada, y se dieron cuenta que había visto una visión en el Templo; y les estaba haciendo señas y permaneció mudo.
23 Y cuando terminaron los días de su ministerio en el Templo, regresó a su casa.
24 Después de ese tiempo, Elisabet, segura de que iba a ser madre, se mantuvo apartada de los ojos de los hombres durante cinco meses, diciendo:
25 El Señor me ha hecho esto, porque sus ojos estaban puestos en mí para quitarme la vergüenza. ante los ojos de los hombres.
26 En el sexto mes, el ángel Gabriel fue enviado por Dios a una ciudad en Galilea, llamada Nazaret,
27 A una virgen que iba a casarse con un hombre llamado José, de la familia de David; y el nombre de la virgen era María.
28 Y el ángel entró a donde ella estaba, y dijo: Paz favorecida de Dios, á la cual se ha dado gracia especial; el Señor está contigo.
29 Pero ella se turbó mucho con estas palabras, y se dijo a sí misma: ¿Cuál puede ser el propósito de estas palabras?
30 Y el ángel le dijo: No temas, María, porque tienes la aprobación de Dios.
31 Y mira, darás a luz un hijo, y su nombre será Jesús.
32 Él será grande, y será nombrado el Hijo del Altísimo; y el Señor Dios le dará el reino de David, su padre.
33 Él tendrá dominio sobre la casa de Jacob para siempre, y su reino no tendrá fin.
34 Y María le dijo al ángel: ¿Cómo puede ser esto, porque no conozco varón?
35 Y respondiendo el ángel, le dijo: El Espíritu Santo vendrá sobre ti, y el poder del Altísimo reposará sobre ti; y el que nacerá, será llamado santo, Hijo de Dios.
36 Incluso ahora Elisabet, que es de tu familia, ella ha concebido; y este es el sexto mes para ella, la que llamaban estéril.
37 Porque no hay nada imposible para Dios.
38 Y María dijo: Yo soy sierva del Señor; hágase conmigo como me dices. Y el ángel se fue.
39 Entonces María se levantó y fue rápidamente a las montañas, a una ciudad de Judá;
40 Y entró en la casa de Zacarías, y saludó a Elisabet.
41 Y cuando la voz de María llegó a los oídos de Elisabet, el bebé hizo un movimiento repentino dentro de ella; entonces Elisabeth estaba llena del Espíritu Santo,
42 Y ella dijo a gran voz: Bendita eres entre las mujeres, y bendito es el fruto de tu vientre.
43 ¿Cómo es que la madre de mi Señor viene a mí?
44 Porque, verdaderamente, cuando el sonido de tu voz vino a mis oídos, el bebé en mi cuerpo hizo un movimiento repentino de alegría.
45 Dichosa la que creyó, porque se cumplira lo que le fue dicho por parte del Señor.
46 Y María dijo: Mi alma glorifica a Dios;
47 Mi espíritu se alegra en Dios mi Salvador.
48 Porque ha tenido compasión de su sierva, aunque es pobre y humilde: desde ahora, todas las generaciones me dirán bienaventurada.
49 Porque él poderoso me ha hecho grandes cosas; y Santo es su Nombre.
50 Su misericordia es para todas las generaciones a los que le temen.
51 Con su brazo ha hecho actos de poder; esparció a los soberbios en el pensamiento de sus corazones.
52 Ha derribado reyes de sus tronos, levantando en alto a los humildes.
53 Los que no tenían comida los llenaban de cosas buenas; a los hombres ricos los despachó sin nada en sus manos;
54 Su ayuda ha dado a Israel, su siervo, y no se olvidó de tratarlo con misericordia,
55 Como él dio su palabra a nuestros padres. Para con Abraham y su descendencia para siempre.
56 Y María estuvo con ella por cerca de tres meses y luego regresó a su casa.
57 Ahora era tiempo de que Elisabeth diera a luz, y ella tuvo un hijo.
Lucas 1 in La Biblia en Español Sencillo

San Lucas 1:8-57 in Santa Biblia — Reina Valera 1909

8 Y aconteció que ejerciendo Zacarías el sacerdocio delante de Dios por el orden de su vez,
9 Conforme á la costumbre del sacerdocio, salió en suerte á poner el incienso, entrando en el templo del Señor.
10 Y toda la multitud del pueblo estaba fuera orando á la hora del incienso.
11 Y se le apareció el ángel del Señor puesto en pie á la derecha del altar del incienso.
12 Y se turbó Zacarías viéndole, y cayó temor sobre él.
13 Mas el ángel le dijo: Zacarías, no temas; porque tu oración ha sido oída, y tu mujer Elisabet te parirá un hijo, y llamarás su nombre Juan.
14 Y tendrás gozo y alegría, y muchos se gozarán de su nacimiento.
15 Porque será grande delante de Dios, y no beberá vino ni sidra; y será lleno del Espíritu Santo, aun desde el seno de su madre.
16 Y á muchos de los hijos de Israel convertirá al Señor Dios de ellos.
17 Porque él irá delante de él con el espíritu y virtud de Elías, para convertir los corazones de los padres á los hijos, y los rebeldes á la prudencia de los justos, para aparejar al Señor un pueblo apercibido.
18 Y dijo Zacarías al ángel: ¿En qué conoceré esto? porque yo soy viejo, y mi mujer avanzada en días.
19 Y respondiendo el ángel le dijo: Yo soy Gabriel, que estoy delante de Dios; y soy enviado á hablarte, y á darte estas buenas nuevas.
20 Y he aquí estarás mudo y no podrás hablar, hasta el día que esto sea hecho, por cuanto no creíste á mis palabras, las cuales se cumplirán á su tiempo.
21 Y el pueblo estaba esperando á Zacarías, y se maravillaban de que él se detuviese en el templo.
22 Y saliendo, no les podía hablar: y entendieron que había visto visión en el templo: y él les hablaba por señas, y quedó mudo.
23 Y fué, que cumplidos los días de su oficio, se vino á su casa.
24 Y después de aquellos días concibió su mujer Elisabet, y se encubrió por cinco meses, diciendo:
25 Porque el Señor me ha hecho así en los días en que miró para quitar mi afrenta entre los hombres.
26 Y al sexto mes, el ángel Gabriel fué enviado de Dios á una ciudad de Galilea, llamada Nazaret,
27 A una virgen desposada con un varón que se llamaba José, de la casa de David: y el nombre de la virgen era María.
28 Y entrando el ángel á donde estaba, dijo, ¡Salve, muy favorecida! el Señor es contigo: bendita tú entre las mujeres.
29 Mas ella, cuando le vió, se turbó de sus palabras, y pensaba qué salutación fuese ésta.
30 Entonces el ángel le dijo: María, no temas, porque has hallado gracia cerca de Dios.
31 Y he aquí, concebirás en tu seno, y parirás un hijo, y llamarás su nombre JESUS.
32 Este será grande, y será llamado Hijo del Altísimo: y le dará el Señor Dios el trono de David su padre:
33 Y reinará en la casa de Jacob por siempre; y de su reino no habrá fin.
34 Entonces María dijo al ángel: ¿Cómo será esto? porque no conozco varón.
35 Y respondiendo el ángel le dijo: El Espíritu Santo vendrá sobre ti, y la virtud del Altísimo te hará sombra; por lo cual también lo Santo que nacerá, será llamado Hijo de Dios.
36 Y he aquí, Elisabet tu parienta, también ella ha concebido hijo en su vejez; y este es el sexto mes á ella que es llamada la estéril:
37 Porque ninguna cosa es imposible para Dios.
38 Entonces María dijo: He aquí la sierva del Señor; hágase á mí conforme á tu palabra. Y el ángel partió de ella.
39 En aquellos días levantándose María, fué á la montaña con priesa, á una ciudad de Judá;
40 Y entró en casa de Zacarías, y saludó á Elisabet.
41 Y aconteció, que como oyó Elisabet la salutación de María, la criatura saltó en su vientre; y Elisabet fué llena del Espíritu Santo,
42 Y exclamó á gran voz, y dijo: Bendita tú entre las mujeres, y bendito el fruto de tu vientre.
43 ¿Y de dónde esto á mí, que la madre de mi Señor venga á mí?
44 Porque he aquí, como llegó la voz de tu salutación á mis oídos, la criatura saltó de alegría en mi vientre.
45 Y bienaventurada la que creyó, porque se cumplirán las cosas que le fueron dichas de parte del Señor.
46 Entonces María dijo: engrandece mi alma al Señor;
47 Y mi espíritu se alegró en Dios mi Salvador.
48 Porque ha mirado á la bajeza de su criada; porque he aquí, desde ahora me dirán bienaventurada todas las generaciones.
49 Porque me ha hecho grandes cosas el Poderoso; y santo es su nombre.
50 Y su misericordia de generación á generación á los que le temen.
51 Hizo valentía con su brazo: esparció los soberbios del pensamiento de su corazón.
52 Quitó los poderosos de los tronos, y levantó á los humildes.
53 A los hambrientos hinchió de bienes; y á los ricos envió vacíos.
54 Recibió á Israel su siervo, acordándose de la misericordia,
55 Como habló á nuestros padres á Abraham y á su simiente para siempre.
56 Y se quedó María con ella como tres meses: después se volvió á su casa.
57 Y á Elisabet se le cumplió el tiempo de parir, y parió un hijo.
San Lucas 1 in Santa Biblia — Reina Valera 1909

Lucas 1:8-57 in Versión Biblia Libre

8 Mientras Zacarías servía como sacerdote ante Dios, a nombre de su división sacerdotal,
9 fue elegido por suerte conforme a la costumbre de los sacerdotes, para entrar al templo del Señor y quemar el incienso.
10 Durante el momento en que se ofrendaba el incienso, había una gran multitud orando afuera.
11 Entonces un ángel del Señor se le apareció a Zacarías, y se puso en pie a la derecha del altar del incienso.
12 Cuando Zacarías vio al ángel, se asustó.
13 Pero el ángel le dijo: “No tengas miedo, Zacarías. Tu oración ha sido escuchada, y tu esposa Isabel concebirá de ti un hijo, y le llamarás Juan.
14 Él te traerá gozo y alegría, y muchos celebrarán su nacimiento.
15 Él será grande a la vista del Señor. Se negará a beber vino o cualquier otra bebida alcohólica. Estará lleno del Espíritu Santo incluso antes de nacer.
16 Convertirá a muchos israelitas nuevamente al Señor su Dios.
17 Irá delante del Señor en el espíritu y el poder de Elías, para convertir los corazones de los padres a sus hijos nuevamente, y convertir a los rebeldes hacia un entendimiento recto, para preparar a un pueblo que esté listo para el Señor.
18 “¿Cómo puedo estar seguro de esto?” le preguntó Zacarías al ángel. “Soy un hombre viejo, y mi esposa también está envejeciendo.”
19 “Yo soy Gabriel,” respondió el ángel. “Yo estoy en la presencia de Dios, y fui enviado para hablarte y entregarte esta buena noticia.
20 Pero como no creíste lo que te dije, te quedarás mudo, sin poder hablar, hasta el momento indicado, cuando mis palabras se cumplan.”
21 Afuera el pueblo estaba esperando a Zacarías, preguntándose por qué estaba demorando tanto en el templo.
22 Cuando finalmente salió, no pudo hablarles. Y ellos se dieron cuenta de que había tenido una visión en el templo, pues aunque podía hacer señas, estaba completamente mudo.
23 Después que hubo terminado su turno de servicio, regresó a casa.
24 Poco tiempo después, su esposa Isabel quedó embarazada. Y se quedó en casa por cinco meses.
25 “El Señor ha hecho esto en mi favor,” dijo ella, “ahora que ha quitado la desgracia que tenía ante los ojos de los demás.”
26 Al sexto mes de su embarazo, Dios envió al ángel Gabriel a una joven llamada María, que vivía en la ciudad de Nazaret, en Galilea.
27 Ella estaba comprometida en matrimonio con un hombre llamado José.
28 El ángel la saludó. “Eres privilegiada en gran manera,” le dijo. “El Señor está contigo.”
29 María estaba muy confundida por lo que él le dijo, y se preguntaba cuál era el significado de ese saludo.
30 “No te preocupes, María,” siguió diciendo el ángel, “pues Dios te ha mostrado su gracia.
31 Quedarás embarazada y tendras un hijo. Lo llamarás Jesús.
32 Él será muy grande, y será llamado el Hijo del Altísimo. El Señor le dará el trono de David su padre,
33 y reinará sobre la casa de Jacob para siempre. Su reino nunca tendrá fin.”
34 “¿Cómo es esto posible?” preguntó María. “Aún soy virgen.”
35 “El Espíritu Santo vendrá sobre ti, y el poder del Altísimo te cubrirá. El bebé que va a nacer es santo, y será llamado el Hijo de Dios.
36 E Isabel, tu pariente, aún a su avanzada edad, está embarazada también. La mujer de quien el pueblo decía que no podía tener hijos, ya tiene seis meses de embarazo.
37 Nada es imposible para Dios.”
38 “Aquí estoy, lista para ser la sierva del Señor,” dijo María. “Que suceda conmigo tal como dijiste.” Entonces el ángel se fue.
39 Poco después, María se alistó y se apresuró a las montañas de Judea, a la ciudad donde
40 estaba la casa de Zacarías. Al entrar llamó a Isabel.
41 Y tan pronto como Isabel escuchó la voz de María, el bebé saltó de alegría dentro de ella. Isabel estaba llena del Espíritu Santo,
42 y gritó con voz muy fuerte: “¡Cuán bendita eres entre las mujeres, y cuán bendito será el hijo que nacerá de ti!
43 ¿Por qué soy tan honrada en recibir la visita de la madre de mi Señor?
44 Tan pronto como escuché que me llamabas, saludándome, mi bebé saltó de alegría dentro de mí.
45 ¡Cuán afortunada eres, porque estás segura de que el Señor hará lo que te ha prometido!”
46 María respondió: “¡Cuánto alabo al Señor!
47 Estoy tan feliz con Dios, mi Salvador,
48 porque decidió que yo, su sierva, fuera digna de su consideración, a pesar de mi humilde procedencia. De ahora en adelante todas las generaciones dirán que fui bendecida.
49 El Dios Altísimo ha hecho grandes cosas por mí; su nombre es santo.
50 Su misericordia dura de generación en generación para aquellos que lo respetan.
51 Con su poder él ha destruido en pedazos a quienes con arrogancia piensan que son muy sabios.
52 Él derriba a los poderosos de sus tronos, y exalta a los humildes.
53 Él llena a los hambrientos con cosas buenas para comer, y echa a los ricos con las manos vacías.
54 Él ha ayudado a su siervo Israel, acordándose de él con misericordia,
55 tal como se lo prometió a nuestros padres, a Abrahán y sus descendientes para siempre.”
56 Y María se quedó con Isabel durante tres meses y luego regresó a su casa.
57 Llegó el momento en que Isabel tendría su bebé, y tendro un hijo.
Lucas 1 in Versión Biblia Libre