16 El día es tuyo y la noche es tuya: hiciste la luz y el sol.
17 Por ti fueron arreglados todos los límites de la tierra; has hecho verano e invierno.
18 Ten esto en cuenta, oh Señor, que tus enemigos han dicho cosas crueles, y que tu nombre ha sido menospreciado por un pueblo de mala conducta.
19 No des el alma de tu paloma al halcón; no permitas que la vida de los pobres se te escape de la memoria para siempre.