11 Pusístenos como á ovejas para comida, y esparcístenos entre las gentes.
12 Has vendido tu pueblo de balde, y no pujaste en sus precios.
13 Pusístenos por vergüenza á nuestros vecinos, por escarnio y por burla á los que nos rodean.
14 Pusístenos por proverbio entre las gentes, por movimiento de cabeza en los pueblos.
15 Cada día mi vergüenza está delante de mí, y cúbreme la confusión de mi rostro,
16 Por la voz del que me vitupera y deshonra, por razón del enemigo y del que se venga.
17 Todo esto nos ha venido, y no nos hemos olvidado de ti; y no hemos faltado á tu pacto.
18 No se ha vuelto atrás nuestro corazón, ni tampoco se han apartado nuestros pasos de tus caminos.
19 Cuando nos quebrantaste en el lugar de los dragones, y nos cubriste con sombra de muerte,
20 Si nos hubiésemos olvidado del nombre de nuestro Dios, ó alzado nuestras manos á dios ajeno,
21 ¿No demandaría Dios esto? porque él conoce los secretos del corazón.
22 Empero por tu causa nos matan cada día; somos tenidos como ovejas para el matadero.