4 “Compadécete de mí, Señor,” te pido. “Por favor, sáname, porque he pecado contra ti.”
5 Los que me odian andan diciendo cosas malas en mi contra. Dicen: “¿Cuándo morirá este para que la gente por fin lo olvide?”
6 Vienen a visitarme, pero su simpatía no es sincera. Solo están interesados en las malas noticias, las cuales esparcen por ahí tan rápido como salen de mi casa.
7 Todos los que me odian andan murmurando sobre de mi condición, esperando que empeore.