5 Cuando los problemas vengan él me protegerá y me mantendrá a salvo, me esconderá en su casa, tan seguro como si me hubiera puesto en una gran roca.
6 Sostendrá mi cabeza en alto sobre mis enemigos que me rodean. Ofreceré sacrificio en su casa con cantos de alegría, y cantaré alabanzas al Señor.
7 Escúchame, Señor, cuando llamo pidiendo ayuda. Ten gracia conmigo y respóndeme.
8 Tú me dijiste, “Ven a mí.” Y estoy viniendo a ti, Señor.b
9 No te rehúses a hablar conmigo. No te enojes con tu siervo ni te vayas. Eres el único que me ayuda, así que por favor no me niegues ni me abandones, Dios de mi salvación.