167 Obedezco tus leyes y las amo con todo mi corazón.
168 Guardo tus mandamientos y tus leyes porque tú ves todo lo que hago.
169 Señor, escucha mi triste lamento. Ayúdame a entender conforme me lo has prometido.
170 Por favor, escúchame y sálvame confirme a tu promesa.
171 Déjame elevar alabanzas a ti, porque tú me enseñas lo que debo hacer.
172 Cantaré de tu palabra, porque todos tus mandamientos son rectos.
173 Por favor, sé pronto para ayudarme porque he elegido seguir tus caminos.
174 Anhelo tu salvación, Señor; y tus enseñanzas me proporcionan felicidad.