28 Sí, ella está esperando secretamente como una bestia por su alimento, y el engaño por ella se incrementa entre los hombres.
29 ¿Quién dice, Oh! quien dice, ¡Ah! ¿Quién tiene argumentos violentos? quién tiene dolor? quién tiene heridas sin causa? y ojos oscuros?
30 Aquellos que se sientan tarde sobre el vino: aquellos que buscan vino mezclado.
31 Evita que tus ojos miren el vino cuando está rojo, cuando su color es brillante en la taza, cuando baja suavemente;
32 Al final, su mordisco es como el de una serpiente, su herida como la herida de un serpiente venenosa.
33 Tus ojos verán cosas extrañas, y dirás cosas retorcidas.