Text copied!
Bibles in Spanish

Lucas 18:11-24 in Spanish

Help us?

Lucas 18:11-24 in La Biblia en Español Sencillo

11 El fariseo, tomando su posición, se dijo a sí mismo estas palabras: Dios, te doy gracias porque no soy como los otros hombres, ladrones, injustos, que son malvados, adúlteros, o como este publicano.
12 Dos veces en la semana ayuno; Doy la décima parte de todo lo que tengo.
13 El publicano, por otro lado, manteniéndose lejos, y sin levantar ni siquiera sus ojos al cielo, hizo señales de dolor y dándose golpes de pecho dijo: Dios, ten misericordia de mí, un pecador.
14 Les digo que este hombre regresó a su casa con la aprobación de Dios, y no el otro, porque todo el que se engrandece a sí mismo será humillado y el que se humilla será engrandecido.
15 Y trajeron los niños a él, para que él pusiera las manos sobre ellos; pero cuando los discípulos lo vieron, ellos reprendieron a la gente por hacer esto.
16 Pero Jesús los llamó, diciendo: Dejen que los niños vengan a mí, y no se los impidan, porque de ellos es el reino de los cielos.
17 De cierto, de cierto te digo, que cualquiera que no se someta al reino de Dios como un niño pequeño, no entrará en lo absoluto.
18 Y cierto gobernante le hizo una pregunta, diciendo: Maestro bueno, ¿qué tengo que hacer para tener vida eterna?
19 Y Jesús le dijo: ¿Por qué dices que soy bueno? Nadie es bueno, solo Dios.
20 Tú tienes conocimiento de lo que dice la ley: No adulteres, no mates a nadie, no tomes lo que no es tuyo, no des falso testimonio, da honor a tu padre y a tu madre.
21 Y él dijo: Todo esto lo he hecho desde mi juventud.
22 Y Jesús, oyéndole, le dijo: Una cosa te falta hacer; vende tus bienes y dáselo a los pobres, y tendrás riquezas en el cielo; y ven y sígueme.
23 Pero al oír estas palabras, se entristeció mucho, porque tenía grandes riquezas.
24 Y Jesús mirándolo, dijo: ¡Cuán difícil es para los que tienen riquezas entrar en el reino de Dios!
Lucas 18 in La Biblia en Español Sencillo

San Lucas 18:11-24 in Santa Biblia — Reina Valera 1909

11 El Fariseo, en pie, oraba consigo de esta manera: Dios, te doy gracias, que no soy como los otros hombres, ladrones, injustos, adúlteros, ni aun como este publicano;
12 Ayuno dos veces á la semana, doy diezmos de todo lo que poseo.
13 Mas el publicano estando lejos no quería ni aun alzar los ojos al cielo, sino que hería su pecho, diciendo: Dios, sé propicio á mí pecador.
14 Os digo que éste descendió á su casa justificado antes que el otro; porque cualquiera que se ensalza, será humillado; y el que se humilla, será ensalzado.
15 Y traían á él los niños para que los tocase; lo cual viendo los discípulos les reñían.
16 Mas Jesús llamándolos, dijo: Dejad los niños venir á mí, y no los impidáis; porque de tales es el reino de Dios.
17 De cierto os digo, que cualquiera que no recibiere el reino de Dios como un niño, no entrará en él.
18 Y preguntóle un príncipe, diciendo: Maestro bueno, ¿qué haré para poseer la vida eterna?
19 Y Jesús le dijo: ¿Por qué me llamas bueno? ninguno hay bueno sino sólo Dios.
20 Los mandamientos sabes: No matarás: No adulterarás: No hurtarás: No dirás falso testimonio: Honra á tu padre y á tu madre.
21 Y él dijo: Todas estas cosas he guardado desde mi juventud.
22 Y Jesús, oído esto, le dijo: Aun te falta una cosa: vende todo lo que tienes, y da á los pobres, y tendrás tesoro en el cielo; y ven, sígueme.
23 Entonces él, oídas estas cosas, se puso muy triste, porque era muy rico.
24 Y viendo Jesús que se había entristecido mucho, dijo: ¡Cuán dificultosamente entrarán en el reino de Dios los que tienen riquezas!
San Lucas 18 in Santa Biblia — Reina Valera 1909

Lucas 18:11-24 in Versión Biblia Libre

11 El Fariseo estaba en pie y oraba, diciendo: ‘Dios, te agradezco porque no soy como otras personas, como los ladrones o criminales, adúlteros, o incluso como este recaudador de impuestos.
12 Yo ayuno dos veces a la semana, y pago el diezmo de mi salario.’
13 “Pero el recaudador de impuestos se quedó a la distancia. Ni siquiera era capaz de mirar al cielo. En lugar de ello golpeaba su pecho y oraba: ‘Dios, por favor, ten misericordia de mí. Soy un pecador.’
14 “Les aseguro, que este hombre se fue a su casa justificado ante los ojos de Dios y no el otro. Porque los que se exaltan serán humillados, pero los que se humillan serán exaltados.”
15 Y algunos padres trajeron a sus hijos donde Jesús para que los tocara y los bendijera. Cuando los discípulos vieron lo que sucedía, trataron de detenerlos.
16 Pero Jesús llamó a los niños hacia él. “Dejen que los niños vengan a mí,” dijo. “No se lo impidan, porque el reino de Dios le pertenece a los que son como ellos.
17 Les digo la verdad: quien no recibe el reino de Dios como lo hace un niño, nunca entrará a él.”
18 Uno de los líderes religiosos se acercó a Jesús y le preguntó: “Maestro bueno, ¿qué debo hacer para heredar la vida eterna?”
19 “¿Por qué me llamas bueno?” respondió Jesús. “Nadie es bueno, solo Dios.
20 Ya conoces los mandamientos: no cometas adulterio, no mates, no robes, no des falso testimonio, honra a tu padre y a tu madre.”
21 “He guardado todos estos mandamientos desde que era joven,” respondió el hombre.
22 Cuando Jesús oyó esto, le dijo al hombre: “Aún te falta una cosa. Ve y vende todo lo que tienes, dale el dinero a los pobres, y tendrás tesoro en el cielo. ¡Entonces ven y sígueme!
23 Pero cuando el hombre oyó esto se puso muy triste, porque era muy rico.
24 Cuando vio su reacción, Jesús dijo: “¡Cuán difícil es para los ricos entrar al reino de Dios!
Lucas 18 in Versión Biblia Libre