14 La Palabra se volvió humana y vivió entre nosotros, y nosotros vimos su gloria, la gloria del único hijo del Padre, lleno de gracia y verdad.
15 Juan dio su testimonio acerca de él, exclamando al pueblo: “Este es del cual yo les hablaba cuando les dije: ‘El que viene después de mi es más importante que yo, porque antes de que yo viviera, ya él existía.’”
16 Nosotros todos hemos sido receptores de su generosidad, de un don gratuito tras otro.
17 La ley fue dada por medio de Moisés; pero la gracia y la verdad vinieron por medio de Jesucristo.
18 Aunque ninguno ha visto a Dios, Jesucristo, el Único e Incomparable, quien está cerca del Padre, nos ha mostrado cómo es Dios.