15 Y esto está de acuerdo con las palabras de los profetas, como se dice:
16 Después de estas cosas volveré, y levantaré la tienda de David que fue destruida; repararé sus ruinas y lo volveré a levantar:
17 Para que el resto de los hombres busquen al Señor, y todos los gentiles que han sido consagrados a mi nombre,
18 Dice el Señor, que hace conocer todas estas cosas de tiempos antiguos, ha dado su palabra.
19 Por esta razón, mi decisión es que no se les debe imponer cargas innecesaria a aquellos que, no siendo judíos, dejan sus antiguas creencias para seguir a Dios.
20 Sino que les damos órdenes de que se guarden de las cosas ofrecidas a los dioses falsos, y de la fornicación, de los animaless muertos enos, y de la sangre
21 Porque Moisés, desde tiempos muy lejanos, tiene sus predicadores en cada ciudad, leyendo su ley en las sinagogas todos los sábados.
22 Entonces pareció bueno a los Apóstoles y a los ancianos y a toda la iglesia, enviar hombres de en medio de ellos a Antioquía con Pablo y Bernabé; Judas, llamado Barsabás, y Silas, hombres de importancia entre los hermanos.
23 Y enviaron una carta junto a ellos, diciendo: Los Apóstoles, los ancianos, los hermanos, a los hermanos que son de los gentiles en Antioquía, Siria y Cilicia, Salud.
24 Porque tenemos conocimiento de que algunos que se apartaron de nosotros les han estado molestando con sus palabras, poniendo sus almas en duda; a quien no dimos tal orden;
25 Nos pareció bien, habiendo llegado a un acuerdo juntos, enviar a estos hombres a ustedes, con nuestros queridos Bernabé y Pablo,
26 hombres que han entregado sus vidas por el nombre de nuestro Señor Jesucristo.
27 Así que hemos enviado a Judas y a Silas, ellos hablarán personalmente con ustedes para explicarles todo.
28 Porque le pareció bien al Espíritu Santo, y a nosotros, no poner sobre ustedes nada más que estas cosas necesarias;
29 Que se abstengan de las cosas ofrecidas a los dioses falsos, y de la sangre, no coman carne de animales estrangulados, de fornicación; eviten la inmoralidad sexual; si se abstienen de esto, lo harán bien. Que les vaya bien.
30 Entonces ellos, siendo enviados, descendieron a Antioquía, y habiendo reunido al pueblo, les dieron la carta.
31 Y después de leerlo, se alegraron por la consolación que les daban.
32 Y Judas y Silas, que eran ellos mismos profetas, dieron enseñanza a los hermanos y los fortalecieron en la fe.