10 Yo soy muro, y mis pechos como torres, desde que fuí en sus ojos como la que halla paz.
11 Salomón tuvo una viña en Baal-hamón, la cual entregó á guardas, cada uno de los cuales debía traer mil monedas de plata por su fruto.
12 Mi viña, que es mía, está delante de mí: las mil serán tuyas, oh Salomón, y doscientas, de los que guardan su fruto.