4Tú, oh Dios, eres mi rey: manda saludes á Jacob.
5Por medio de ti sacudiremos á nuestros enemigos: en tu nombre atropellaremos á nuestros adversarios.
6Porque no confiaré en mi arco, ni mi espada me salvará.
7Pues tú nos has guardado de nuestros enemigos, y has avergonzado á los que nos aborrecían.
8En Dios nos gloriaremos todo tiempo, y para siempre loaremos tu nombre. (Selah.)
9Empero nos has desechado, y nos has hecho avergonzar; y no sales en nuestros ejércitos.