12Si dijeres: Ciertamente no lo supimos; ¿no lo entenderá el que pesa los corazones? El que mira por tu alma, él lo conocerá, y dará al hombre según sus obras.
13Come, hijo mío, de la miel, porque es buena, y del panal dulce á tu paladar:
14Tal será el conocimiento de la sabiduría á tu alma: si la hallares tendrá recompensa, y al fin tu esperanza no será cortada.
15Oh impío, no aceches la tienda del justo, no saquees su cámara;