19Tales son las sendas de todo el que es dado á la codicia, la cual prenderá el alma de sus poseedores.
20La sabiduría clama de fuera, da su voz en las plazas:
21Clama en los principales lugares de concurso; en las entradas de las puertas de la ciudad dice sus razones:
22¿Hasta cuándo, oh simples, amaréis la simpleza, y los burladores desearán el burlar, y los insensatos aborrecerán la ciencia?
23Volveos á mi reprensión: he aquí yo os derramaré mi espíritu, y os haré saber mis palabras.