2Un hombre necio no tiene placer en él entendimiento, sino sólo para que lo que está en su corazón salga a la luz.
3Cuando llega el malhechor, una baja opinión viene con él, y con la pérdida del honor viene la vergüenza.
4Las palabras de la boca de un hombre son como aguas profundas; la fuente de la sabiduría es como una corriente que fluye.