25Entonces él respondió, y dijo: Si es pecador, no lo sé: una cosa sé, que habiendo yo sido ciego, ahora veo.
26Y volviéronle á decir: ¿Qué te hizo? ¿Cómo te abrió los ojos?
27Respondióles: Ya os lo he dicho, y no habéis atendido: ¿por qué lo queréis otra vez oir? ¿queréis también vosotros haceros sus discípulos?
28Y le ultrajaron, y dijeron: Tú eres su discípulo; pero nosotros discípulos de Moisés somos.
29Nosotros sabemos que á Moisés habló Dios: mas éste no sabemos de dónde es.