1Y cuando se fue, en el camino vio a un hombre ciego de nacimiento.
2Y sus discípulos le hicieron una pregunta, diciendo: Maestro, ¿fue por el pecado de este hombre, o el pecado de su padre y su madre, que ha estado ciego de nacimiento?
3Jesús dijo en respuesta: No fue por su pecado, ni por causa de su padre o su madre; era para que las obras de Dios se manifiesten abiertamente en él.
4Si bien es de día debemos hacer las obras del que me envió: llega la noche en que no se puede hacer ningún trabajo.
5Mientras estoy en el mundo, soy la luz del mundo.