31E Israel fue fiel al Señor todos los días de Josué, y todos los días de los hombres mayores que aún vivían después de la muerte de Josué, y habían visto lo que el Señor había hecho por Israel.
32Y los huesos de José, que los hijos de Israel habían tomado de Egipto, pusieron en la tierra en Siquem, en la propiedad que Jacob había obtenido de los hijos de Hamor, el padre de Siquem, por cien siclos de plata: Y se convirtieron en la herencia de los hijos de José.
33Entonces tuvo lugar la muerte de Eleazar, hijo de Aarón; y su cuerpo fue enterrado en la colina de Finees, su hijo, que le fue dado en la región montañosa de Efraín.