14Entonces los hermanos enviaron a Pablo directamente al mar; pero Silas y Timoteo se quedaron allí.
15Pero los que fueron con Pablo lo llevaron hasta Atenas; y habiendo recibido órdenes para Silas y Timoteo, de que viniesen a él lo más pronto posible.
16Mientras Pablo los esperaba en Atenas, su espíritu se turbó, porque él veía toda la ciudad llena de imágenes de los dioses.
17Así que tuvo discusiones en la sinagoga con los judíos y los gentiles temerosos de Dios, y todos los días en el mercado con los que estaban allí.